CARBÓN MINERAL
El carbón mineral, según el que utilicemos y cómo lo utilicemos nos aporta un óptimo poder calorífico para nuestras cocinas o estufas. Con el carbón mineral se consigue una mayor durabilidad y aporte calórico que la leña, por ejemplo, ya que la madera cuenta con una durabilidad muy inferior al carbón de piedra.
El carbón del que disponemos es la antracita, ideal para el consumo de estufas, cocinas o chimeneas.
Disponemos de la antracita de dos tamaños:
· Galletilla. Es la piedra de mayor tamaño. No por ser de mayor tamaño tiene mayor durabilidad. Se suele emplear en cocinas, calderas o estufas que tienen un tiro deficiente. Lo que sucede con la galletilla es que entre las piedras de carbón queda más espacio para que fluya el aire y con eso consigue que la combustión sea más eficaz.
· Grancilla. Es la piedra de menor tamaño. Se suele emplear en las calderas de comunidad de vecinos, auqnue también suele ser muy utilizado en las cocinas de particulares.
Disponemos de distintos formatos del producto: a granel, en sacos o en bolsas.
CARBÓN EN BOLSAS
El carbón en bolsas suele ser el formato más utilizado por nuestros clientes, dado la comodidad del formato para tenerlo en casa o un lugar habilitado para su almacenamiento.
El cliente tiene la posibilidad de recogerlo en nuestro almacenes sin un mínimo de bolsas o si lo prefiere se lo llevamos a su casa con un mínimo de 15 bolsas (un vale).
CARBÓN EN SACOS
Otro de nuestros formatos es el carbón en sacos. Suele ser muy utilizado por los clientes que desean descargar esos sacos en carboneras o lugares habilitados para almacenar el carbón suelto.
El carbón en sacos a domicilio cuenta con un mínimo de 6 sacos (un vale). El cliente también tiene la posibilidad de recogerlo en el almacén, con las ventajas que él mismo puede cargar los sacos que necesita y todo va al peso, con lo que sus costes son mucho menor.